miércoles, 12 de agosto de 2020

Cuando los pequeños nos dicen no a todo

Niño disgustado dice no | Vector Premium

 Una mamá desconcertada nos comenta que su pequeño de tres años, suele decir: ¡no quiero!, ¡no me gusta!, ¡no voy! y a las diferentes preguntas e indicaciones señala: ¡no a todo!

Esa actitud nos lleva a reflexionar que los niños pasan por periodos dónde la palabra ¡NO! suelen usarla siempre y esto empieza entre los dos y más de tres años. Sin embargo, el ¡NO! es una palabra familiar, que han ido escuchando diariamente, cuando los padres dicen: ¡no corras!, ¡no grites!, ¡no hables!, ¡no toques esto…!, ¡no saltes en la cama!, y los pequeños pueden estar imitando la conducta del adulto.

Es importante recordar que conforme un niño va creciendo, su conducta va siendo más compleja y aunque suene contradictorio, esa negación es una manera de reafirmar su identidad y comunicar que su deseo es diferente al de nosotros los adultos.

El niño está aprendiendo que es distinto y que puede oponerse y decir NO. Utiliza ese descubrimiento como una manera de autoafirmarse y de hacer notar su presencia, con deseo de buscar el poder.

Sería un error en rotularlos como niños tiranos y desafiantes, simplemente comprender que es una fase natural y transitoria del desarrollo, que debemos marcar los límites y normas.

¿Cómo ayudarlo?

Escuchemos su “no” y argumentemos que podemos entender su negativa,  pero que lo que estamos mandando es importante. Seamos firmes.

Evitemos reírnos de sus “no” porque reforzaría su uso.

Cambiemos nuestra estrategia, utilizando menos el “no” o reemplazando por otra palabra.

 Ivonne Santiváñez P.

Psicóloga-Psicoterapeuta

martes, 12 de mayo de 2020

Consejería Psicológica Online

Estamos viviendo momentos muy difíciles y deseamos acompañarlos en este proceso y proponemos nuevos modos de cercanía para escucharlos, conversar, orientar, contener...por ello el equipo de Psicólogas y Psicoterapeutas de Centro T'ikay: Margarita Arboleda, Carmen Fernández, Ivonne Santiváñez y Chabuca Fernández queremos ofrecerles nuestros servicios vía online


lunes, 11 de mayo de 2020

Terapia de Lenguaje y Aprendizaje


La especialista Verónica de la Peña, miembro del equipo de profesionales de Centro T'ikay, profesora de educación inicial con amplia experiencia en el trabajo con niños, brinda los servicios de Terapia de Lenguaje y Aprendizaje modalidad online.


martes, 21 de abril de 2020

Mientras respire seguiré luchando

En un abrir  y cerrar de ojos ¡todo cambió! Y qué hacemos? Hay dos opciones: una, me quedo paralizado o  me encierro, me  deprimo ?¿ niego lo que está sucediendo y quiero seguir como siempre? o  abro los ojos, me enfrento a la situación  y trato de ponerle ganas a ver cómo vivo esta nueva vida, cómo le saco algún provecho para mí y para los demás? ¿Intento adaptarme y voy  creando nuevas formas de vivir esta situación?

Nadie dice que es fácil, creo que en un primer momento todos pasamos por la sorpresa, desconcierto, miedo a la situación, desconfianza, dudas, frustración, impotencia, rabia, elementos semejantes al de un duelo porque por un lado es la amenaza y el riesgo permanente a nuestra salud y en muchos casos a la vida misma,  sentimos que la muerte puede estar a la vuelta de la esquina, por otro lado está otra pérdida: la de nuestro estilo de vida. Podemos tener malestares físicos además de ansiedad, angustia.
Pero todos contamos con  una fuerza interior, una energía  que nos empuja a salir adelante, a no quedarnos y también contamos con algún apoyo de nuestro entorno,  la familia, amigos; igualmente son pilares la música, la pintura, ejercicios de relajación, meditación, la actividad física, la lectura, escribir, etc. Usemos la mente  para viajar a algún lugar placentero, la imaginación pensando cómo serán las nuevas formas de convivir mientras esta pandemia se termina.
Si sentimos que no avanzamos pidamos ayuda, hay muchas instituciones que gratuitamente ofrecen sus servicios por internet o a alguien de nuestra confianza.
A buscar esa fortaleza en nuestro interior para seguir avanzando,

Margarita Arboleda
Psicóloga-Psicoterapeuta  

lunes, 30 de marzo de 2020

Oportunidad para aprovechar en la pandemia




Cada dificultad nos brinda una oportunidad única para aprender, crecer como seres humanos, demanda nuestra creatividad para enfrentarla.
Podemos aprovecharla para ejercitar aquello que queremos para ser mejores personas, como individuos y en nuestras relaciones interpersonales. Puede ser momento, por ejemplo, para ser más pacientes, tolerantes a la frustración, aprender a esperar, en una sociedad  “agitada” en la que la inmediatez se hace cada vez más intensa,  todo lo queremos  “al toque”.
Quizá sea hora, asimismo, de reformular nuestra escala de valores, de ver qué es lo más importante para nuestras vidas, qué es lo que nos enseña esta circunstancia vivida.
Emocionalmente hacer un esfuerzo por  desarrollar, fortalecer la empatía,  dentro de la familia, “ponernos en los zapatos del otro” para un mejor entendimiento  y mejorar nuestras relaciones. Empatía,  también,  con las personas que están atravesando situaciones angustiantes, siendo más  solidarios.
Podemos aprovechar, también para dialogar en  familia, compartir inquietudes, hacer actividades en conjunto, jugar. Cuántas veces hemos dicho “ya quiero volver a casa para estar en familia”, pues ya lo tienes, tómalo.

 Recuerda :   Este problema es una oportunidad  ¿La aprovechas?

jueves, 27 de febrero de 2020

Manejo de impulsos y convivencia

Resultado de imagen para chicos impulsivosVemos a diario personas cuyo impulso sale en forma primitiva: molestan, exigen lo que quiere, presionan, gritan, pegan, insultan; personas que crecieron muy probablemente sin o con muy pocos límites, por lo que no se percataron de que la otra persona existe diferente  a ellos mismos, con sus propias características, necesidades, ideas,  sentimientos, viendo muchas veces a los otros como extensión de sí mismos, de sus deseos, dando como resultado poco respecto y consideración a los demás siendo  muy difícil convivir con ellos.   
Recordemos que los límites son necesarios pues  evita el desborde de los impulsos, favoreciendo el manejo de los mismos, pudiendo así las personas encauzar la energía hacia algo productivo.  Ejemplo de ello lo tenemos en  personas con una fuerte carga  impulsiva que la expresan civilizadamente, por ejemplo a través de actividades artísticas como pintura, escultura, manualidades, costura, cerámica, deportes fuertes o también dirigiendo, liderando grupos, con un fuerte impulso a crecer. Ellas pudieron desarrollar el control de sí misma, la empatía,  la capacidad para posponer, manejar la frustración, esperar, habilidades necesarias para vivir en comunidad.
Para una convivencia saludable  recordemos que “mis derechos terminan donde empiezan los derechos de los demás”.

Margarita Arboleda Boza
Psicóloga-Psicoterapeuta
Miembro del Equipo Directivo


  

viernes, 24 de mayo de 2019

Los Abuelos como Maestros

Cuando pensamos en abuelos y nietos varias preguntas se nos vienen a la mente: ¿qué significa ser abuelo?, ¿cómo asumen los abuelos este nuevo papel en la vida?, ¿qué expectativas tienen sus propios hijos hacia ellos como abuelos?, ¿qué significa para los nietos tener abuelos? Y como éstas muchas preguntas más.
Resultado de imagen para abuelos y ninosEntramos en un mundo realmente interesante y muy rico porque se juegan muchos afectos, ilusiones, responsabilidades, que se van tejiendo día a día en la relación entre abuelos y nietos.
En esta línea pensar en los Abuelos como Maestros, podemos decir que sí es una función del ser abuelos, porque éstos llegan a ser unos verdaderos Maestros de la Vida, son ellos quienes enseñarán a sus nietos la continuidad de la existencia, les transmitirán los valores familiares, las costumbres propias, así como también les presentarán la época en la que ellos fueron niños, jóvenes, adultos y tuvieron sus propios hijos.
El ser abuelos les brinda a las personas un nuevo motivo para su existencia y cuando pensaban que ya habían terminado todas sus funciones, les llega de pronto otra, que los llenará de ilusiones y sentirán lo importante que son tanto para sus hijos, pues siguen siendo padres, como para sus nietos, que ven en ellos a unas personas que los aman incondicionalmente, que disfrutan de su compañía, que tienen tiempo y disposición para pasarse largas horas, ya sea contando un cuento, inventando historias y juegos, preparando galletitas, construyendo juguetes que no funcionan con pilas, pero que les permitirá tener una relación cara a cara con el abuelo o abuela y gozarán el momento de la preparación, ya sea del postre, o del nuevo juguete, como una cometa por ejemplo y celebrarán juntos el resultado final de su tarea.
Es una etapa hermosa de la vida, en la que los nietos disfrutarán y se enriquecerán con la compañía de sus abuelos.
Carmen Fernández Gonzales
Psicóloga-Psicoterapeuta
Miembro del Equipo Directivo